Fandango

Esta noche, la luna coquetea un poco con los fantasmas de la melancolía…el alcohol ha sacado su lado valiente y las penas se quedan guardadas en el diván del pasado.

Las buenas costumbres están recluidas en sus celdas mientras la armónica libera miles de sonidos…tan efímeros y a la vez tan permanentes que poco a poco logran excitar sus sentidos. Sólo se dedica a vivir este momento, a retener su presente, mientras se burla de la tristeza y poco a poco se libra de los recuerdos del ayer.

Y con el resguardo y la complicidad de la luna, busca unos labios que satisfagan el placer etéreo, aquellos ojos que le inciten a pecar junto a esas manos tímidas que provoquen mil sensaciones en su piel.

¡Pues sólo ella sabe la verdad! Ella sabe muy bien que la decadencia no es un defecto, sino una virtud.

Y entre cerveza y cerveza, el sudor le hace recordar que sigue con vida, que en ese mundo de fantasía en el que ella ha decidido residir las quimeras no han perdido su vigencia, pese a la opinión de la gente que le rodea.

Pues esta noche, la locura es una espectadora más que le recuerda que aún no ha pasado de moda mientras brindan a su salud por su felicidad etérea, mientras ríen con una sonrisa desinhibida, llena de una euforia descontrolada.

Café ES3

Recordando las noches en ese lugar tan especial...

Las noches del café ES3 incitan a reflexionar a todo aquel valiente que entra en el mágico recinto...Entre esas noches mágicas que el destino nos depara, un lunático encontró a una cofradía peculiar…amante de las letras y las charlas fortuitas...

Tienen el poder de transportarte a un viaje literario-musical si eres capaz de distinguir su inusual mundo, en donde la realidad y la imaginación se conjugan, dando como resultado tertulias interminables que abarcan todo lo que nuestras mentes puedan imaginar.

Quizás esto es generado por las letras de Cortázar o la música de Sabina…O probablemente solo por la grata compañía que se encuentra en un recinto que tiene el don de mantener brillando el espíritu de la obscuridad y de su luna amada. Total, ¿Hay un lugar en dónde puede conjugarse toda una vida en torno a una taza de café?

Mi cuerpo es mío y sólo yo sé con quien compartirlo

La ciudad es una puta que nos espera todas las noches para consolarnos con su amor arrabalero…Y en algún momento de nuestra vida, todos sucumbimos a ella con un irrefrenable placer que embarga nuestro ser por un poco de tiempo, retornando a la realidad con un dolor más intenso al descubrir que lo único que encontramos de nuestra amada…es su ausencia.

Así pasa con la mayoría de nosotros; en el momento en que descubrimos como nos hemos corrompido con tal de no quedar rezagados de nuestro entorno, nos engañamos con la idea de que es imprescindible compartir nuestro cuerpo, incluso con desconocidos, olvidando la importancia de nuestra identidad. Pero muy en el fondo, guardamos lo que en realidad apreciamos, nuestros sentimientos.

Y no busco infundir principios de moralidad en nuestros días, tampoco es mi intención criticar o juzgar, simplemente, busco encontrar la razón del porqué nos prostituimos por tan poco… ¿O es quizás nuestro instinto de burdel lo que nos hace olvidar el corazón para conseguir satisfacer nuestra sexualidad?

¿O acaso nos hemos vuelto tan fríos como para congelar nuestros sentimientos hacía la persona amada, hasta el extremo de negarle la entrada a nuestra existencia?
Esto puede convertirse en un tema incompleto, debido que le falta una respuesta…
Respuesta, que alguno de nosotros podríamos disipar.

Serrat canta “No hay nada más bello que lo que nunca he tenido y nada más amado que lo que perdí” y por más etéreo o impalpable que una relación pueda llegar a ser, nunca debemos olvidar que en nuestra vida no todo es el placer carnal, también contamos con un mundo en donde la fantasía y la realidad se funden para crear un cenit que todos podemos llegar a conocer…

Aunque sólo sea por un momento.

Mujer Fugaz

Hay momentos en la vida en las que el destino nos depara agradables sorpresas, aún en situaciones en las que pareciera que todo lo que nos rodea nuestro se derrumba en mil pedazos.

Uno de ellos es justo ahora. Uno de esos días que bien podrían catalogarse como 'malos', en los que te encuentras inmerso en divagaciones que te hacen pensar demasiadas cosas que comúnmente nunca tienen solución, cuando quedé hipnotizado con la mirada de una mujer que en mi vida había visto, y probablemente, volveré a ver.

Al instante, una sonrisa se dibujó en mis labios y trate de vislumbrar el milagro de descubrir una respuesta similar en su rostro. Poco a poco, su mirada se fue atravesando con la mía y por un momento me pareció que el tiempo se hizo eterno, convirtiéndose en el cómplice perfecto de una inocente travesura romántica.

Sabía entonces que esos segundos me permitirían capturar en mi memoria la belleza de una perfecta desconocida, y así, descubrir el encanto de una mujer que me convirtió en un tripulante del tren de la felicidad.

No obstante, el tiempo también se convierte en un cruel verdugo y la magia de lo desconocido se difumina muy rápido de nuestras vidas. Ahora, sólo me queda el recuerdo de una efímera sonrisa.

El día de hoy, una desconocida me hizo feliz; y aunque nunca sabré como se llama, cuántos años tendrá, si tiene novio o en donde vive, valió la pena descubrir que aún puedo enamorarme de alguien por no más de 5 minutos. 

Colores

Verde, azul, rosa, amarillo, morado, negro, blanco, rojo...

Miles de colores se desprenden de tu cuerpo cada vez que recorro con mis labios cada milímetro de tu piel.

Te has convertido en una obra de arte más exquisita para mis sentidos, pues cada noche que estoy junto a ti, una nueva gama de colores se adueñan de mis pupilas y de nuestros deseos.

Gracias a la implacable perversión que nace en mi ser al querer encontrar tu verdadera esencia, descubro una nueva tonalidad de tu placer.
 
Tu infinita abundancia de colores, insospechados y pocas veces percibidos por los hombres, me permiten descubrir la fórmula correcta para dibujar mi vida junto a ti; sólo basta con permanecer dentro de tus fantasías hasta que tu pasión lo permita y las noches nos inspiren a seguir matizando nuestra realidad.